Gabriel sacrifica a un inocente para disipar las sospechas de Andrés y dejarlo en evidencia.

Los celos que Andrés (Dani Tatay) son la excusa perfecta para Gabriel (Oriol Tarrasón), que lo deja en evidencia ante toda la familia y sacrifica a una inocente para librarse de sus sospechas.

Andrés y Tasio interrogan a Remedios, quien asegura no saber nada del sabotaje, o al menos resulta muy convincente. Damián da por válidas las pruebas en su contra y decide avisar a la Guardia Civil.

Remedios (Susana Hernáiz) es detenida en la fábrica sin saber a qué se enfrenta realmente. Gabriel informa a Begoña de lo ocurrido… Todos quedan sorprendidos, pero las circunstancias personales de Remedios la colocan como principal sospechosa.

Gema sigue inquieta por Teo, sobre todo al ver que ha sufrido un nuevo golpe. Además, sospecha que Raúl es una mala influencia para el niño y le pide que se aleje de él.

Tras su último encuentro con Damián —interrumpido por Digna—, Irene nota cierta sintonía entre ambos. Insegura, no duda en acudir a su cuñada para resolver sus dudas.

Ante el visible deterioro de Pedro, Digna comienza a sospechar que algo no va bien. Recurre a Luz, quien se ve obligada a mentirle, algo que la incomoda profundamente. Además, llegan los resultados de las pruebas… ¿Serán buenas o malas noticias?

Andrés no cree que Remedios sea culpable y trata de convencer a Begoña de que Gabriel está detrás de todo. Sin embargo, esta vez Begoña cree que Remedios tenía razones para actuar.

Mientras tanto, Gabriel empieza a arrepentirse de haber aceptado seducir a Begoña para contentar a María. Aunque, por ahora, ha logrado contener la situación, la actitud cada vez más agresiva de Andrés le genera inquietud.

Pelayo admira la conexión entre Marta y Fina, y cree tener en su mano la oportunidad perfecta para la joven. Tras ver su trabajo fotográfico, hace una llamada que podría cambiar su vida.

La situación de Teo en el colegio no mejora, y sigue ocultándola a sus padres… hasta que Gema descubre la verdadera razón por la que ha estado robando dinero.

Andrés sigue convencido de que Remedios es inocente y cree que, una vez más, Cristina podría ser clave para destapar a Gabriel.

Damián finalmente acude a su cita: José Gutiérrez, el padre biológico de Cristina, lo espera en un lugar discreto de Toledo. Tiene algo importante que decirle.