La tensión ha alcanzado su punto más alto esta semana en ‘Sueños de libertad’.

En uno de los capítulos más sobrecogedores de los últimos días, Marta no ha podido seguir ocultando la verdad y le ha revelado a su hermano Andrés el oscuro secreto que la atormenta: Santiago está muerto, y Fina fue quien acabó con su vida en defensa propia.

Entre lágrimas, Marta confiesa que Fina no volverá porque la está protegiendo. Relata cómo, tras la fuga de Santiago de la cárcel, él irrumpió en la casa de los Montes dispuesto a vengarse.

Cuando llegó, Fina ya estaba maniatada, y el agresor amenazaba con una navaja. En medio del forcejeo, Fina logró liberarse, golpeó a Santiago con una botella y, en la caída, él mismo se clavó el arma. Una tragedia inevitable que marcó el destino de ambas.

Marta revela además que Pelayo fue testigo y cómplice de la ocultación del crimen. Él, conocedor de la relación sentimental entre las dos mujeres, acudió para alertarlas de la fuga y terminó ayudándolas a enterrar el cuerpo cerca de la finca. Desde entonces, el silencio ha sido su única protección.

“Fina se marchó para salvarme”, confiesa Marta, convencida de que su amada se ha alejado para evitar que la justicia o las sospechas recaigan sobre ella. Su marcha no fue una huida, sino un acto de amor y sacrificio.

Andrés, impactado, apenas puede articular palabra. Su abrazo a Marta resume la carga emocional del momento: el peso de una verdad insoportable que podría hacerlo todo pedazos.

Ahora, los espectadores se preguntan qué ocurrirá si la verdad sale a la luz… ¿Podrá Marta seguir guardando el secreto o llegará el momento de enfrentarse a las consecuencias?